La estación central de Berlín (Hauptbahnhof) destaca como uno de los proyectos arquitectónicos más fabulosos de la capital de Alemania. Después de 11 años de trabajos, la antigua estación Lehrter se reabrió al público el 28 de mayo de 2006 como la estación de cruce de caminos más grande y moderna del continente europeo. Justo poco antes del comienzo del Mundial de Fútbol de 2006.
Esta flamante estación viene a reemplzar a las ocho estaciones terminales que existían en Berlín en el ocaso del siglo XIX con una sola estación de intercambios en dos niveles en forma de cruce.
Como su nombre indica, está situada en el centro de Berlín, cerca de la Cancillería, del Reichstag (edificio del Parlamento de Alemania) y de la Puerta de Brandeburgo. Ya se ha convertido en un icono turístico más de esta ciudad germana.